El gobierno de la Generalitat ha descartado la deducción fiscal para contrarrestar los costes del material escolar que había prometido inicialmente y ha asegurado que las ayudas «llegarán al inicio del próximo curso». La consejera catalana de Economía, Natàlia Mas, preguntada este martes por este apoyo económico al pleno del Parlament, ha dicho que «lo hemos repensado y hemos optado por otro sistema. Será un procedimiento ágil».
El ejecutivo de Pere Aragonès ha concluido que la vía fiscal era la más rápida, pero no la mejor manera de ofrecer estas ayudas porque las familias más vulnerables no hacen la declaración de la renta y, por lo tanto, «quedarían excluidas». La consejera no ha avanzado detalles del nuevo sistema de ayudas ni si será retroactivo para el curso 2022-2023.
En septiembre de 2022 el presidente Aragonès anunció que los presupuestos incluirían una ayuda de 100 euros por alumno para reducir el incremento de los costes asociados a la escolarización. El mecanismo previsto de la medida era a través de la deducción del tramo autonómico del IRPF del ejercicio de la renta de 2022.