La diputada de Junts en el Congreso de los Diputados Pilar Calvo ha relacionado el caso de los pagos del FC Barcelona al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira, con la operación Cataluña, y ha considerado que es una «continuación» de la supuesta trama relacionada con el conjunto de prácticas que el Ministerio del Interior de Jorge Fernández Díaz (PP) habría llevado a cabo para detener al movimiento independentista catalán.
En un hilo de Twitter, la juntera ha defendido que «el mejor Barça de la historia no ha comprado árbitros», y ha vinculado lo que considera «casualidades bastante sospechosas» al «Deep State«. «Cuando yo digo que es continuación de la operación Cataluña me refiero a que siempre hay un Deep State a punto para cargarse cualquier institución como el Barça, que ha hecho grande nuestro país, Cataluña. No digo que esté directamente relacionada. Pero hay casualidades bastante sospechosas», ha manifestado Calvo.
En este sentido, la diputada de Junts ha añadido: «la Fiscalía demanda al Barça con información que solo le puede haber pasado Hacienda (¿y la protección de datos?), justo ahora que Sandro Rosell ha presentado demanda contra el Estado como víctima de la operación Cataluña que le costó dos años de prisión preventiva. Recordamos que fue absuelto».
Calvo ha ido más allá y ha apuntado que «todo hace pensar» que se trata de lawfare (guerra jurídica o judicial): «Los hechos (acuerdo FCB-Negreira) acabaron en 2018. Ahora, con la vía administrativa prescrita, se usa un hecho que podría haber tenido una respuesta legal administrativa, deportiva o fiscal y se elige la vía penal contra el Barça», ha destacado.
Rahola y Antich se suman a Calvo
La diputada de Junts, sin embargo, no ha sido la única persona de la órbita independentista que ha comparado el caso Negreira con la operación Cataluña. La periodista y presentadora en 8TV Pilar Rahola ha manifestado en un artículo en El Periódico que «a pesar de la futileza de la acusación, se ha creado inmediatamente una ofensiva desde todos los flancos» y ha considerado que «tal como pasa con la cuestión independentista, la ‘Fuenteovejuna’ española se activa “todos a una” contra el mismo enemigo».
«¿Hay paralelismos con la cuestión catalana? Todos: manipulación mediática, estigmatización social, justicia ideológica, política centralizadora…», ha añadido Rahola, que ha señalado el que, a parecer suyo, es el objetivo de todo: «Hacer caer a Laporta e inestabilitzar al Barça, con la intención final de convertirlo en S.A. y poderlo controlar».
El director d’El Nacional José Antich, en un artículo en el medio que lidera, ha comparado «la rapidez con que la Fiscalía y el gobierno español se han personado como acusación en el caso Negreira» con «la lentitud con que lo han hecho, o más bien no lo han hecho, en casos tan graves como, por ejemplo, la Operación Cataluña», y ha «constatado» que «hay temas que por muy graves que sean, se pudren en el limbo de los despachos de los diferentes estamentos judiciales o de los despachos de los ministros, y otros de los cuales sí que gusta ofrecer titulares rápidos que gustan en Madrid y son convenientemente recompensados».
