Uno de los principales representantes del macroproyecto de Hard Rock en Vila-seca i Salou, el presidente de Hard Rock International, James F. Allen, aparece en los Paradise Papers y es gerente de una sociedad offshore radicada en Aruba, reflejada en estos documentos, según revela una investigación del semanario Directa. Además, esta información destapa que la adjudicataria que recibió la licencia del casino es una sociedad fantasma sin actividad alguna desde el año 2011.
El portavoz de la Plataforma Aturem Hard Rock, Eloi Redón, ha anunciado que pedirá reunirse con la consejera de Economía de la Generalitat, Natàlia Mas, para abordar en qué situación queda el macroproyecto ahora que las últimas revelaciones apuntan a que la Generalitat puede haber negociado con un presunto defraudador fiscal. Aturem Hard Rock ha reprochado este último punto al gobierno catalán y Redón ha planteado que si lo sabían, «son cómplices, y si no, son unos negligentes».
También ha destacado, sobre la sociedad adjudicataria inactiva durante más de una década, que «debía acreditar solvencia técnica y económica». En ese sentido, se ha hecho eco de preguntas parlamentarias registradas por la CUP para aclarar, entre otras cuestiones, si la Generalitat investigó a la empresa antes de concederle la licencia y si estaba informada de la conexión entre Allen y los Paradise Papers.
