El Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC) aprobó este miércoles un acuerdo en el que considera que las burlas e insultos incluidos en el programa Zona Franca de TV3 de los deportados catalanes al campo de exterminio nazi de Mauthausen están amparados por la libertad de expresión. Este posicionamiento del CAC, aprobado por unanimidad de los cinco miembros del consejo de gobierno, ha indignado a los familiares de las personas que fueron asesinados o sobrevivieron al genocidio que practicaron los nazis en los campos de exterminio. El CAC ha emitido este dictamen después de que la Síndica de Greuges de Catalunya le exigiera que diera una respuesta a la asociación Amical de Mauthausen que reclamaba sin éxito que TV3 rectificara y pidiera perdón por estas burlas e insultos.
El presentador de Zona Franca, Joel Díaz, empezó el cuarto programa de la temporada, el 20 de octubre, haciendo un comentario sobre la celebración de la Feria del Libro de Frankfurt. “Cataluña ha enviado a muchos libreros. Por tanto, en Alemania no se veían tantos catalanes muertos de hambre desde que cerraron Mauthausen”. El público no se rió y el presentador reaccionó diciendo: “No, ¿no? Aún no… ¿no ha pasado tiempo suficiente, todavía, no, para que haga gracia esto?”. Juan Manuel Calvo, presidente de la asociación Amical de Mauthausen, entidad que agrupa a los ex-deportados republicanos de los campos de concentración del nazismo así como a los familiares y amigos, tanto de los supervivientes como de los deportados que fueron asesinados, presentó una queja y pidió una rectificación con un mensaje que dejó en el portal web de Zona Franca. Pedía que el primer programa de Zona Franca que se emitiera en la semana siguiente, Joel Díaz se retractara de su broma. Pero en ese programa, Díaz no sólo no se retractó sino que conversó con un invitado, Adri Romeo, que trató de “hijos de puta” Amical de Mauthausen por su queja.
TV3 no atendió a las demandas de Amical de Mauthausen. Su director, Sigfrid Gras, justificó los insultos y burlas a los deportados catalanes aduciendo que forma parte de la libertad de expresión que impera en TV3 en los programas de humor mientras que la consejera de vicepresidencia, Laura Vilagrà, dijo en el Parlament que este tipo de humor es «cultura».
La negativa de Zona Franca y TV3 a reparar su desprecio a las víctimas del exterminio nazi ha provocado que el PSC presentara una propuesta de resolución a la comisión de Justicia del Parlament y que Ciudadanos trasladara una pregunta a la Comisión Europea condenando estas burlas e insultos.
El acuerdo del CAC aprecia que “las expresiones analizadas pueden ser desafortunadas e incluso hirientes para casi toda la audiencia. Sin embargo, la utilización de esta tipología de lenguaje en un programa de humor, dadas las unívocas connotaciones sarcásticas, hiperbólicas y efectistas o mordaces, se incluye dentro de los límites de la libertad de expresión, que comprende el recurso de ‘la exageración y la provocación’. Y concluye que «no se ha producido un incumplimiento de la legislación audiovisual vigente».
Los familiares de las víctimas del genocidio nazi no entienden que se las pueda insultar y burlarse de ellas aunque se haga con “connotaciones sarcásticas, hiperbólicas, efectistas y mordaces”. En los campos de concentración de Mauthausen y Gusen, que se abrió cuando el primero quedó desbordado, fueron asesinados durante la segunda guerra mundial 4.427 españoles, de los que 936 eran catalanes. De los catalanes, 469 eran de Barcelona, 209 de Tarragona, 143 de Lérida y 115 de Gerona. El Consejo de Gobierno del CAC lo componen Xevi Xirgo, que es su presidente, propuesto por JuntsxCatalunya, Rosa Maria Molló y Enric Casas, propuestos por el PSC, y Laura Pinyol y Miquel Miralles, propuestos por ERC.
