La Asamblea por una Escuela Bilingüe asegura que ha encontrado una rendija para ampliar las horas de castellano en las aulas, y esquivar así la nueva ley de educación que prohibía fijar porcentajes.
Se basa en una nueva sentencia del TSJC que obliga a una escuela a hacer una asignatura más en castellano. Sin embargo, desde el departamento especifican que en esta aula ya se hacía una materia troncal en castellano como medida cautelar, y, por tanto, la sentencia no cambia nada.
Desde que el Govern aprobó la nueva ley, el TSJC ha reconocido que la sentencia que obligaba a dar el 25% de clases en castellano ha quedado en papel mojado. En consecuencia, no ha impuesto más clases en castellano a los nuevos casos que le llegan.
En cambio, los jueces sí han decidido que los centros en los que ya se hacía más castellano por la petición de algunas familias como medida cautelar lo mantuvieran. Ahora uno de estos casos ya tiene sentencia y los magistrados optan por seguir imponiendo el castellano.
La argumentación de la sentencia dice explícitamente que no fija un porcentaje, pero que debe impartirse en castellano como mínimo una asignatura principal que no sea la de lengua castellana. Por el portavoz de la Asamblea y ex diputado de Ciudadanos, José Domingo, esto abre la puerta a esquivar la nueva ley.
Y todo ello pendientes de que el Constitucional diga si la ley que elimina la posibilidad de fijar porcentajes es válida o vulnera el derecho de los alumnos castellanohablantes.
