El consejero catalán de Empresa y expresidente del Parlamento de Cataluña, Roger Torrent, afirma que es un «escándalo» que la Fiscalía Superior de Cataluña haya decidido presentar un recurso al Tribunal Supremo contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que absuelve de un delito de desobediencia a los exmiembros independentistas de la Mesa del Parlament Roger Torrent, Josep Costa, Eusebi Campdepadrós y Adriana Delgado.
En declaraciones a Els matins de TV3, Roger Torrent ha dicho que «a pesar de que ya estamos acostumbrados, no quiere decir que no se tenga que denunciar y evidentemente denunciamos este escándalo que supone que la Fiscalía, que por un lado, no mueve un dedo cuando hay un caso masivo de espionaje político en Cataluña» y que «en cambio, enseguida que hay una sentencia que nos absuelve desde el punto de vista del sentido común».
En este contexto, el consejero y expresidente de la cámara catalana ha añadido que «la Fiscalía no nos decepciona nunca, continúa con su lógica; y nosotros también continuaremos defendiendo allá donde haga falta que el Parlament tiene que poder hablar de todo, que en el Parlament se puede debatir cualquier tema que quieran los diputados y diputadas».
🔴 @RogerTorrent, conseller d'@empresacat, sobre l'absolució de la mesa del Parlament: "Que la fiscalia recorri l'absolució és un escàndol. En canvi, no mou un dit quan hi ha casos d'espionatge flagrants"#ElsMatinsTV3
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— Els matins TV3 (@elsmatins) December 1, 2022
El Ministerio Público, en el escrito que ha trasladado al tribunal alega una supuesta infracción del precepto constitucional y de la ley, y señala defectos de forma por la negativa del TSJC a aplazar el juicio hasta resolver el recurso que la Fiscalía presentó contra la recusación del magistrado Carlos Ramos. Torrent y Costa también se están planteando recorrer la sentencia absolutoria para que la justicia reconozca la inviolabilidad del Parlamento de Cataluña.
El TSJC absolvió los exmiembros de la Mesa acusados de desobediencia porque consideró que «no se negaron abiertamente» a cumplir las providencias del Tribunal Constitucional, las cuales consideran que no tenían un mandato bastante «claro» y «concreto».
