¿Por qué no veremos el reportaje que ha hecho Cuatro sobre el chollo de Marcela Topor en la XAL?

Porque la cadena de televisión ha suspendido el programa en el que iba a emitirse. Durante unas semanas, un equipo de periodistas del programa En el punto de mira estuvo investigando el contrato de la esposa del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont con la Xarxa Audiovisual Local (XAL). Marcela Topor cobra cada mes 6.000 euros por dirigir y presentar The Weekly Mag, un magazine semanal en inglés que no llega a la hora y media de duración. Ningún trabajador de la XAL cobra esa cantidad y menos por trabajar tan poco. Topor fue contratada por la Diputación de Barcelona, ​​propietaria de la XAL, cuando la gobernaba Convergència Democràtica de Catalunya y los socialistas le han mantenido el salario cuando se han hecho con el poder de la corporación provincial. Los socialistas, eso sí, han dejado de pagar a Topor los meses de julio y agosto que durante el mandato de CDC cobraba como si trabajase.

El reportaje sobre el enchufe de la esposa de Puigdemont en la XAL estaba ya listo para ser emitido. Contaba con datos detallados de su contrato e, incluso, con unas imágenes obtenidas a la salida del local donde se graba The Weekly Mag. En los archivos de Cuatro están las imágenes de Marcela Topor saliendo apresurada de este local, con gafas de sol y escondiéndose de la cámara.

Pero el reportaje ha ido a parar a los archivos de esta cadena de Mediaset. Sus propietarios decidieron que los niveles de audiencia de En en el punto de mira eran demasiado bajos y cancelaron el programa, que presentaba Diego Losada. El 2% de la audiencia televisiva que veía este programa se quedó sin conocer el chiringuito de Topor en la XAL. Si hubieran emitido ese reportaje seguro que el share en Catalunya habría subido aquel día.

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