El Juzgado de Instrucción número 29 de Barcelona ha citado al expresidente del PP, Pablo Casado, para que declare como investigado el próximo 30 de enero por haber afirmado que los profesores de las escuelas catalanas tienen instrucciones de no permitir ir al baño a los alumnos que se lo piden en castellano.
En el auto conocido este miércoles, el juez admite a trámite la querella que presentó contra Casado la Generalitat de Cataluña, por la presunta comisión de los delitos de injurias, calumnias y delito de odio o discriminación.
Casado, que podrá declarar por videoconferencia, también manifestó que «a los hijos de los policías nacionales y guardias civiles se les señala en clase» y que a algunos niños les introducen «piedras en la mochila» por hablar castellano en el patio.
La decisión del Juzgado 30 llega después de que el Tribunal Supremo archivara la investigación sobre las mismas declaraciones, porque Casado había dejado de ser aforado desde que había dejado de ser diputado, y de que los juzgados de Barcelona, inicialmente, remitieran el caso a los juzgados de La Coruña, donde el exlíder del PP había hecho estas declaraciones sobre los profesores y la escuela catalanes.