Icono del sitio El Triangle

Los correbous de Vidreres se celebran tras las protestas animalistas

Correbous de Vidreres (Alberto Tarradas, diputado de Vox en el Parlament)

Correbous de Vidreres (Alberto Tarradas, diputado de Vox en el Parlament).

Entre el malestar de unos y la celebración de otros, Vidreres, el último municipio de Catalunya que sigue celebrando el correbous, ha recuperado la festividad taurina. Ayer, sábado 3 de septiembre, organizaciones animalistas denunciaron el maltrato animal en una fiesta que consideran “prehistórica”.

Manifestantes disfrazados de dinosaurio han sostenido un cartel con el eslogan “Los correbous son prehistóricos” y han reclamado que se prohíban las carreras con vaquillas por las calles y las plazas, el toro embolado y cualquier otro tipo de actividad taurina que haga sufrir a los animales.

La manifestación ha sido convocada por la Agrupación de Vidreres por la Defensa Animal y Ambiental, AnimaNaturalis, Fundación Fauna, FAADA, Lex Ànima, CAS International, Fundación Franz Weber, Libera y Tots Som Poble.

Correbous y “encierro”

A pesar de las protestas, ayer por la tarde la plaza de toros se llenó de seguidores de los correbous y de vidrerenses que querían volver a ver el acto de la Fiesta Mayor tras la suspensión por las medidas contra el Covid-19. Esta mañana, se está produciendo el “encierro” y su versión “infantil” con inflables, en la zona del antiguo matadero.

En esta edición, los organizadores han reforzado las medidas de seguridad en el recinto, porque en el 2019 hubo un accidente con 19 heridos cuando el toro consiguió saltar las vallas y fue abatido a tiros. Ayer, los correbous se celebraron sin incidentes.

Salir de la versión móvil