El grupo Wagner es una formación de mercenarios que, según la inteligencia ucraniana, lidera actualmente los ataques rusos en el frente del Donbás, hasta el punto de que tanto los soldados del ejército ruso como los milicianos movilizados de las repúblicas sublevadas de Lugansk y Donetsk, se limitan a realizar acciones subsidiarias de apoyo de sus acciones. El propósito es intentar limitar el elevado número de bajas sufridas por los militares rusos.
Estos mercenarios se consideran una especie de ejército privado de Putin, de ahí que el 14 de agosto acabara por ser considerado casi festivo por las tropas ucranianas. Ese día dos cohetes impactaron en un edificio de la ciudad de Popasna, en la región de Lugansk, que el grupo Wagner utilizaba como centro de mando y provocaron numerosas bajas. Oficialmente Ucrania localizó estas instalaciones gracias a la imprudencia de un periodista ruso, que publicó en su canal de Telegram una fotografía que permitió identificarlas, pero el hecho de que dentro estuviera Yevyeni Prigozhin, propietario y fundador del Grupo Wagner, al que se llegó a dar por muerto en un primer momento, sugiere la posible intervención de algún servicio de inteligencia occidental.
Prigozhin es uno de los oligarcas más cercanos a Putin, a quien conoció en San Petersburgo cuando regentaba una parada de comida en la calle. Supo sacar provecho de esa amistad. Al poco tiempo pasó a organizar los banquetes oficiales del gobierno ruso, por lo que fue conocido como el ”chef del Kremlin”, y de ahí a conseguir suculentos contratos gubernamentales de restauración para servir la comida de diferentes escuelas en través de la empresa Concord Catering. La aventura no terminó muy bien, la compañía fue demandada por intoxicar a 130 niños. Entre sus demandantes figuraban opositores a Putin, como Alexander Navalny, que le acusaban de suministrar carne podrida en los comedores escolares. Prigozhin también logró hacerse con el contrato para servir a las raciones del ejército ruso.
A mediados de 2013 funda en San Petersburgo la Agencia de Investigación de Internet, empresa dedicada a crear cuentas falsas en las redes sociales, foros de debate online y producir vídeos destinados a impulsar campañas de desinformación al servicio de los intereses de la política exterior del Kremlin. Actualmente está buscado por el FBI, que ofrece una recompensa de 250.000 dólares por cualquier pista que lleve a su detención. Se le acusa de interferir en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 en favor de la candidatura de Donald Trump. La compañía también actuó en Reino Unido para fomentar el voto en favor del Brexit.
Según algunos medios de la oposición al Kremlin, las actividades de la Agencia de Investigación de Internet están supervisadas por el presidente de la Duma (el parlamento ruso) y mano derecha de Putin, Vyacheslav Volodin. La compañía también ha actuado en numerosos países africanos, en buena parte de los cuales están desplegadas hoy las tropas del Grupo Wagner.
Esta empresa de reclutamiento de mercenarios fue creada por Yevyeny Prigozhin junto a Dimitri Utkin. Fue este último, ávido seguidor de Hitler, quien bautizó a este ejército de alquiler con el nombre del compositor favorito del Führer. Recientemente ha sido reconocido por el gobierno ruso con la Orden en el Coraje por su participación en las tareas de “desnazificación” de Ucrania.
El personal de Wagner ha operado en primera línea en todas las guerras recientes en las que Rusia se ha visto involucrada, ya sea luchando junto con el ejército ruso “oficial” o jugando un papel más tradicional de capacitación de los militares autóctonos.
Hoy el Grupo Warner está desplegado en Mali -donde ha acabado haciéndose con el control del país después de la retirada reciente de las tropas francesas- Libia, República Centroafricana, Mozambique y Sudán. También está presente en Siria y, evidentemente en Ucrania. Prigozhin ha aprovechado la influencia que le da Wagner en estos países para abrir otros negocios. Así a través de la empresa Meroe se dedica al tráfico de oro y minerales preciosos extraídos de Sudán, mientras que en Siria otra de sus sociedades, Evro Polis Ltd., ha obtenido un contrato para proteger los pozos de petróleo.
