Este lunes 8 de agosto ha fallecido el periodista Josep Cabayol i Virallonga. Tras una larga trayectoria en medios como Radio 4, Televisión Española y Com Radio, asumió la presidencia de la asociación Solidaridad y Comunicación-SICOM. La ficha biográfica del portal de esta asociación refleja perfectamente lo que ha sido la vida y profesión de este periodista convencido de que su función como tal era la denuncia de las injusticias y el posicionamiento a favor de los más vulnerables. La lucha contra los efectos del cambio climático, desde el ámbito de la información periodística, ha sido su último campo de batalla.
SICOM recoge así su vida y trayectoria: “Nacidoel 5/6/52 en Barcelona, y residente en Cardedeu, Pep, es un periodista hecho a golpe de revuelta personal. Después de jubilarse en Ràdio 4 en 2008, Josep Cabayol i Virallonga, se convertirá en periodista especializado en el cambio climático, la emergencia ambiental y social, la salud planetaria, la crisis energética y de materiales, y el decrecimiento. En el transcurso de su vida profesional, habrá tenido que enfrentarse al pensamiento único, a la verdad única, a los marcos de interpretación inmutables sobre qué somos y hacia dónde vamos. Incluso jubilado, no le dejarán decir lo que piensa si lo que cuestiona es el capitalismo y la necesidad que tiene el sistema económico de crecer para reproducirse.
Sin embargo, estabilizadas sus publicaciones (datos, estudios, reflexiones, pensamiento crítico, debate democrático) en Catalunya Plural, es momento de reconocer su saber adquirido con la maestría de científicos que le han enseñado y acompañado a los programas de radio, artículos , informes (Marta Rivera, Javier Martín Vide, Francisco Doblas, Marco Prohom, Antonio Turiel, Fernando Puig Vilar, Daniela Bene, Jordi Solé, Gabriel Borras, Robert Savé, Jordi Serra Cobo, Olga Margalef, Juan Benach, Itziar González Virós, Antoni Segura, Màrius Martínez, Mónica Vargas, Miguel Pajares, Frederic Pahisa y divulgadores como Neus Casajuana, Siscu Baiges, Enric Feliu y Trini Cuesta, o Daniel Gómez Cañete), y en documentales de los que ha sido director o productor ejecutivo, como ‘ La Plataforma’ (derecho a la vivienda), ‘La Salud el Negocio de la Vida’ (derecho a la salud), ‘Mi Piel’ y ‘Descendientes’ (todas somos iguales), y ’50 grados’ (crisis climática, de salud, alimentaria, energética, derecho a migrar).
En diciembre de 1994, le encargan la puesta en marcha, como subdirector y jefe de Redacción, de los Servicios Informativos de la futura COM Ràdio, que entonces aún no tiene nombre definitivo. Aquellos dos años marcarán su futuro. La red de emisoras nunca podrá ser lo que le habían dicho que sería porque los políticos, pese a las palabras bonitas, nunca quisieron que lo fuera (palabras vacías). Por el contrario, por perseguir los objetivos fundacionales fue reprendido. Una historia que a partir de entonces le perseguiría, por una u otra causa, pero en todos los casos de carácter político, en los años siguientes.
Cabayol regresa a TVE, donde trabajaba antes de ir a Com Ràdio, como redactor jefe, y después de hacerle un traje a medida (reportajes glorificadores) a la Infanta Cristina cuando se casa, se da cuenta de que está harto de ese periodismo servil (y no se puede quejar porque es ‘jefe’ por dinero) que se hace incluso en los medios públicos pagados con dinero de todas.
Es entonces cuando decide volver a los orígenes, en Ràdio 4 (antes había trabajado en COPE Reus), donde empezó de verdad su carrera profesional. Eran los inicios de este siglo XXI, y prefiere dirigir un programa hecho en una emisora de poca audiencia pero donde le dejan trabajar, que ‘ser usado y figurar’ en una televisión, casi siempre impersonal y distante.
Eso sí, en 2002, cuando regresa a Ràdio 4, lleva en la cartera temas que últimamente ha estudiado, no habituales en los programas tipo de las radios oficiales, que quiere exponer y compartir con los oyentes: educación, medio ambiente, energía, internet, solidaridad, política, este mundo no es el único posible
Nada más poner en marcha Gent de Món en septiembre de 2001, se encuentra con los atentados del día 11/9/01. La gravedad de los hechos y sus repercusiones le cambian los planes. Sin embargo, a pesar de las guerras, no deja de hablar de la Paz como método para resolverla. Y aprende, porque sabe que se va a quedar sin programa. Así fue. Tendrá que esperar una temporada haciendo deportes.
Por último, será tiempo de hacer la Agenda, situando la energía, el medio ambiente, la salud planetaria y la solidaridad (todas somos iguales), como los espacios estrella que se convertirán en los ejes de investigación que marcarán los trabajos periodísticos de Cabayol una vez jubilado.
Hasta su jubilación, sin embargo, será víctima de todo tipo de obstáculos y trampas puestas por ‘dirigentes profesionales’ dedicados a entorpecer el trabajo de periodistas que no se creen la cosmovisión oficial y abren la audiencia a pensar a través de otro marco interpretativo”.
