El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha mantenido firme en la posición de España sobre Kosovo y, frente al primer ministro de Albania, Edi Rama, ha vuelto a remarcar que España «no puede estar a favor del reconocimiento de Kosovo».
Rama ha recordado que «los buenos amigos también pueden tener diferencias» y que la posición de España, que no reconoce la independencia de Kosovo, es consecuencia de cuestiones internas españolas y no se debe a ningún tipo de discriminación o prejuicio frente a la comunidad kosovar.
Sánchez ha señalado que España no puede reconocer el territorio porque ha habido una declaración unilateral de independencia que cree viola el derecho internacional.
Por otra parte, en esta gira por los países balcánicos, Sánchez también ha manifestado este lunes que no ve una mayoría parlamentaria para reformar el delito de sedición y ha asegurado que, si estuviera, el Gobierno central la plantearía.
Así lo ha traslado en declaraciones a los medios, preguntado sobre los compromisos del Ejecutivo para acabar con la judicialización de la política y las reformas en las que está pensando si descarta modificar la sedición.
«He estado claro, yo soy favorable a reformar el Código Penal en estos delitos», aseguró, y apuntó que por ahora no ve la mayoría parlamentaria necesaria, pero que si se consiguiera «el gobierno central planteará esta reforma, no puede ser de otra forma».
Así, aseguró que no se trata de una cuestión «de opinión política», sino que España debe «homologarse» en este tipo de delitos en otros países como la democracia «consolidada que es». Por último, recalcó que la mayoría de los penalistas afirman que hay «necesidad» de reformar el Código Penal en estos delitos.
