Junts gana el pleito al PDeCAT y se queda el nombre del partido

El juzgado dice que los posconvergentes no tienen legitimidad para impugnar acuerdos internos de los junteros

La presidenta de Junts, Laura Borràs, y el secretario general, Jordi Turull
La presidenta de Junts, Laura Borràs, y el secretario general, Jordi Turull.

El Juzgado de Primera Instancia número 3 de Barcelona ha desestimado la demanda interpuesta por el PDECat, partido heredero de Convergència, contra Junts y miembros del partido en la que se impugnaba la asamblea que cambió los cargos de la dirección de esta última formación, fundada por Carles Puigdemont, antes de la ruptura entre ambas organizaciones y que derivó en una disputa por sus siglas.

La juez considera que PDECat y Junts son dos partidos diferentes y que el primero no está legitimidad para meterse en los movimientos del segundo. De hecho, la sentencia dice que la demanda del PDECat «se formula en sustitución de sus principales afectados», que habrían sido el ex secretario y la extesorera de Junts.

Así, la juez dice que no ha quedado acreditado «qué repercusión cierta» tienen los acuerdos de Junts impugnados por el PDECat en la esfera jurídica de los exconvergentes.

Durante el juicio, la defensa del PDECat reprochó a Junts haberse saltado las normas durante la asamblea para quedarse con la marca. Desde el partido de Puigdemont se relativizó aquella asamblea y se dijo que se había hecho de forma telemática por culpa de la pandemia.

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