El rey Juan Carlos ha regresado a España después de casi dos años en Abu Dhabi. El emérito ha aterrizado en Vigo sobre las ocho y media de la tarde, en medio de una gran expectación mediática. Hacía 655 días que el emérito no pisaba territorio español, desde que se marchó el verano del 2020, cuando la Fiscalía abrió varias investigaciones para averiguar si podría haber cometido algún delito relacionado con el cobro de comisiones ilegales y haber evadido impuestos.
Una vez cerradas estas investigaciones, el monarca regresa a España, y lo hace a la localidad gallega de Sansenxo y después viajará hasta Madrid, donde está previsto que se reúna con su hijo y actual rey, Felipe VI. La reunión será el lunes en la Zarzuela, donde también estará la reina Sofía y otros miembros de la familia real.
La vuelta del rey emérito a España sigue provocando malestar dentro del gobierno español. Y ya no sólo son críticos desde Unides Podem. Desde el PSOE no son tan beligerantes, pero más de una voz de entre los ministros ha valorado que Juan Carlos debería dar explicaciones.
Una de ellas fue la de la vicepresidenta primera, Nadia Calviño. Afirmó, en una entrevista en la Cadena SER, que en los últimos años se han conocido «informaciones que son muy inquietantes»: «Todos los ciudadanos españoles merecen una explicación». En términos similares se ha pronunciado la ministra de Justicia, Pilar Llop.
Por su parte, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, insistió en que el rey emérito debe rendir cuentas a la ciudadanía tras su comportamiento «sin duda cuestionable», ya que lo ve necesario para la «dignificación» de la Casa del Rey.
Pedro Aragonès también ha criticado este jueves el regreso del rey emérito. El presidente de la Generalitat ha dicho que esta vuelta «contrasta» con el exilio de los eurodiputados de Junts, Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí. Según Aragonés, el rey emérito debería «asumir sus responsabilidades».
