La Defensora del Pueblo ucraniano, Liudmila Denisova, ha denunciado este lunes, 11 de abril, la violación constante durante semanas de 25 niñas y adolescentes, de entre 11 y 14 años, en un sótano de la localidad de Bucha. Ha asegurado a ‘The New York Times’ que nueve de ellas han quedado embarazadas: “Los soldados rusos les dijeron que las violarían de tal manera que no querrían tener relaciones sexuales con ningún hombre para evitar que tengan hijos ucranianos”. El alcalde de Bucha, Anatolii Fedoruk, lo ha confirmado este martes, día 12, y ha aclarado que no desvelará más detalles para proteger su identidad.
“Documentamos minuciosamente cada atrocidad, cada crimen. Hemos creado un archivo especial en línea de estos crímenes para que el mundo conozca la verdad y para que los rusos rindan cuentas por cada gota de sangre ucraniana que derraman”, ha explicado el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, en un comunicado. Además de estas niñas, ha denunciado la violación y el asesinato de decenas de mujeres y de niños.
El miércoles pasado, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha acusado a las fuerzas invasoras de perpetrar “cientos de violaciones” a mujeres y a niñas. “Se han registrado cientos de casos de violación, incluidos los de niñas menores de edad y niños muy pequeños. ¡Incluso un bebé!”, ha informado.
La lupa de la ONU y las ONGs
La agencia de la ONU dedicada a las mujeres y oenegés como Human Rights Watch se han hecho eco de los casos comprobados y de denuncias de agresión sexual por parte de militares rusos. La filial ucraniana de la oenegé La Strada, que defiende los derechos de las mujeres, ha recibido en su número verde “llamadas de siete casos de violación de mujeres y niños ucranianos por parte de ocupantes rusos”, según una responsable de la organización, Aliona Kryvuliak, en declaraciones a AFP. “Puede haber cientos, incluso miles, de mujeres y jóvenes violadas por las tropas rusas”, ha añadido.
La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Sima Bahous, ha asegurado que están recibiendo cada vez más denuncias de violaciones y otros abusos. “La combinación de desplazamientos masivos con una gran presencia de reclutas y mercenarios y la brutalidad mostrada contra los civiles ucranianos ha hecho saltar todas las alarmas”, ha indicado.
La fiscal general de Ucrania, Iryna Venediktova, ha afirmado este martes que, con su investigación tras la invasión rusa, ha obtenido información de que “se están cometiendo o se han cometido” presuntos crímenes de guerra en unos “6.000 lugares” en territorio ucraniano. La fiscal general ha señalado que está haciendo “todo lo posible” por recopilar las pruebas de las violaciones del derecho humanitario que se están cometiendo en Ucrania desde finales de febrero y mostró su esperanza en que “los criminales de guerra puedan ser llevados ante la justicia” con ayuda internacional.
El Ministerio de Defensa de Rusia ha negado las acusaciones y las ha catalogado como un intento de Washington de difundir información falsa por motivos propagandísticos. “Estados Unidos, que tienen muchos años de experiencia en organizar provocaciones con víctimas humanas, continúan su campaña para crear y promover pruebas falsas”, ha expresado.
