Este viernes han empezado a declarar las trabajadoras de la residencia Filella de Tremp (Pallars Jussà), donde en 2020, durante la etapa más dura del covid, murieron un total de 64 residentes. Según ha explicado el abogado de la acusación popular, Xavier Prats, a la ACN, los miembros de la plantilla han afirmado que «fue un caos» y que, incluso, «había residentes pidiendo ayuda en el pasillo» .
«Nadie conocía el plan de contingencia, nadie tenía EPIs y sólo les daban una mascarilla a la semana«, ha manifestado el abogado, quien también ha explicado que las trabajadoras han declarado que se encontraron «solas», sin «ningún tipo de ayuda» y sin nadie que les diera «instrucciones ni formación». «No había ningún registro de temperatura a los trabajadores, no había ninguna medida de control horario ni sabían quién trabajaba y quién no«, ha destacado Prats.
Las trabajadoras han declarado ante el juzgado de instrucción de Tremp, en la causa abierta contra la exdirectora y el exresponsable de higiene sanitaria de la residencia por un presunto delito contra la seguridad en el trabajo. En total, está previsto que declaren hasta 49 trabajadoras. Este viernes lo han hecho nueve y, según el abogado, los días 19 y 26 de abril lo harán varias más.
También hay otra causa abierta contra las mismas exresponsables por los supuestos delitos de homicidio imprudente y trato degradante, en la que, el pasado 31 de marzo, Mossos y directivos de Salut declararon ante el mismo juzgado que existía un «descontrol total» en la residencia Filella.
