La presidenta del Parlamento de Cataluña, Laura Borràs, ha reclamado a los diputados independentistas que eviten hacer «de jueces» con ella aplicándole el artículo 25.4 del reglamento de la cámara, que permite suspender a los representantes que vayan a juicio acusados de corrupción.
Borràs, en declaraciones a TV3, ha dicho que no se siente interpelada por este artículo, que considera que «vulnera» la presunción de inocencia y que es impropio de un Parlamento democrático. Además, ha mantenido que «no he cometido ningún delito, y mucho menos de corrupción».
La presidenta de la cámara catalana ha llamado a los independentistas a no colaborar haciendo lo que ha denominado el «trabajo sucio» de lo que ella considera una «guerra judicial» y una «persecución política». En las filas de Junts, ha asegurado que «no hay ninguna duda» y «todo el mundo está haciendo piña» con ella.
Borràs, que se encuentra a un paso del juicio por el presunto fraccionamiento de contratos de la Institución de las Letras Catalanas (ILC) cuando ella era la directora, ha presentado un recurso contra la decisión adoptada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC ) en ese sentido.
El TSJC cerró la instrucción sobre la causa, abierta por los delitos de prevaricación administrativa, fraude administrativo, falsedad en documento mercantil y malversación de fondos públicos, y abrió un plazo para que la Fiscalía presentara su escrito de acusación.
