El gobierno de España ha incautado en el puerto de Barcelona un yate de 85 metros de eslora valorado en 140 millones de euros, propiedad del oligarca Sergei Chemezov, que es amigo del presidente ruso Vladimir Putin, exagente del KGB y responsable de la corporación estatal Rostec.
Esta inmovilización es una decisión adoptada por el director general de la Marina Mercante, un órgano dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que se enmarca entre las sanciones impuestas por la Unión Europea al régimen ruso a raíz de la invasión de Ucrania.
No será la última medida de estas características, según ha anunciado este lunes por la noche el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, durante una entrevista concedida a La Sexta. Sánchez ha asegurado que las sanciones contra el régimen de Putin y los oligarcas están funcionando, aunque ha indicado que las incautaciones de bienes de los hombres fuertes del régimen ruso son complicadas por el uso de sociedades interpuestas.
Antes de que España inmovilizase al yate de Chemezov, Italia había incautado el mayor velero del mundo, propiedad del oligarca Andrei Melnichenko.
