El Juzgado de Instrucción número 9 de Barcelona ha citado a declarar como investigados a 11 agentes de cuerpos policiales españoles por las cargas que tuvieron lugar durante el 1-O en Barcelona.
El juez ha atendido parcialmente la petición formulada por las acusaciones particulares en esta causa, ejercidas por la asociación Irídia, Òmnium Cultural y la ANC, que habían reclamado las imputaciones de una cuarentena de agentes a los que atribuyen actuaciones ilícitas en 16 centros escolares que se habilitaron como puntos de votación.
Finalmente, ha citado a un agente grabado mientras propinaba una patada a una persona que se encontraba en el suelo, y a otro que empujó escaleras abajo a otras dos personas, en ambos casos en el IES Pau Claris, y a otros dos policías por dar patadas y puñetazos a votantes de la Escola Pia Sant Antoni.
Otros dos agentes más, a los que se les atribuye un uso excesivo de la porra en el colegio Dolors Monserdà, un agente que tiró al suelo, golpeó y pisó la mano de otro votante en la Escola Víctor Català, y un agente que causó, en la escuela Ágora, una herida con la porra que se suturó con siete puntos, también tendrán que declarar en sede judicial.
En cambio, el juez ha descartado citar a un agente acusado de haber pegado un puñetazo en la Escuela Mediterránea, ya que ha concluido que las imágenes podrían mostrar un empujón, y tampoco hará comparecer a ninguno de los acusados por las entidades independentistas por actuaciones en los centros Ramon Llull, Infant Jesús, Projecte y Marenostrum.
Hasta ahora, cuatro años y medio después de los hechos, ningún agente ha sido condenado por su actuación durante el 1-O.
