La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha negado ante el juzgado de instrucción número 21 cualquier irregularidad en la adjudicación de subvenciones a entidades sociales afines a Barcelona En Comú. Durante su declaración, ha insistido en que las ayudas ya se daban antes de su entrada en el consistorio, y ha explicado que la intervención municipal dio automáticamente el visto bueno porque ya se disponía de todos los informes positivos previos.
Colau ha detallado el procedimiento por el que las entidades sociales reciben las subvenciones y ha asegurado que ella no ha intervenido, ya que son las distintas concejalías las que tienen la competencia. Su único papel, según ha manifestado, es aprobar las subvenciones en la reunión de la Comisión de Gobierno municipal, pero no participa en la tramitación de expedientes ni decide qué cantidades deben recibir las entidades.
La alcaldesa ha subrayado que, después de que la intervención lo recomendara, el Ejecutivo municipal dejó de conceder las subvenciones de forma directa y pasó a incluirlas de forma nominativa en los presupuestos. En la declaración judicial, que se ha alargado casi una hora, Colau ha respondido a las preguntas de la Fiscalía y de sus abogados, Olga Tubau y Àlex Solà, pero se ha negado a responder a la acusación particular, ejercida por la Asociación para la Transparencia y la Calidad Democrática, la entidad que la denunció.
Concentración a favor y en contra de Colau
Un centenar de personas se ha acercado esta mañana a las puertas de la Ciudad de la Justicia formando dos grupos: uno en apoyo a alcaldesa -de unas 70 personas- y uno en contra -de unas 30-. Los manifestantes han llegado antes de que empezara la declaración de Colau y se han concentrado unos delante de los demás con pancartas a favor y contrarias a la edil. En los carteles se leían mensajes de todo tipo; desde ‘Bcn vs. lobbies’, ‘Alcaldesa valiente’ o ‘Agbar vs. democracia’ hasta ‘Ahora a llorar’ y ‘Colau dimisión’.
