Pedro Sánchez sostiene que cualquier demanda de independencia es del pasado, y de hecho cree que es algo del siglo XIX o XX. Así lo ha dicho esta tarde en el Senado, en respuesta a una pregunta de Bildu. Pero de rebote estas declaraciones también responden a las demandas que hizo Pere Aragonès en la conferencia desde el MNAC.
El argumento de Sánchez es que un referéndum no sirve para nada, porque, a su juicio, sólo divide con cuestiones binarias, y la identidad es mucho más compleja. Por el contrario, cree que es necesario «integrar a todas las naciones en el seno de la Unión Europea» para ser «más fuertes».
«Creo, y lo digo con todos los respetos, que el independentismo es una teoría política que representa el siglo XIX o el siglo XX», aseveró el presidente español.
Sánchez defiende que su gobierno ha podido darle la vuelta a las relaciones con Catalunya, porque se ha pasado del conflicto permanente al diálogo estable. Prueba de ello, según dice, será la reunión bilateral entre la Generalitat y el Estado del próximo viernes, donde está previsto llegar a varios acuerdos. Y repite que Catalunya está ahora mucho mejor que hace cinco años.