La consejería de Interior de la Generalitat de Cataluña ha decidido poner fin a los cortes de la avenida Meridiana de Barcelona, promovidos por el colectivo Meridiana Resisteix desde que se conoció la sentencia condenatoria del Tribunal Supremo contra los líderes del ‘procés’. El departamento que encabeza Joan Ignasi Elena ha propuesto desplazar las protestas unos metros para que no afecten a los vecinos de la zona, concretamente frente a la estación de Renfe Sant Andreu Arenal, en el paseo Fabra y Puig.
Según ha avanzado NacióDigital, la Dirección General de Administración de Seguridad ha validado el plan de Interior, que pretende «hacer compatible el derecho de manifestación con las menores molestias posibles a vecinos y comerciantes» y «rebajar los episodios de tensión vividos últimamente». En los últimos cortes han coincidido los miembros de Meridiana Resisteix con partidos políticos y otras organizaciones contrarias a las protestas, las cuales Interior afirma que pretendían «fomentar la crispación», y se produjeron diversas situaciones de tensión por el choque entre manifestantes.
Los cortes en la Meridiana se podrán mantener hasta el viernes; después, a partir del sábado, deberán reubicarse en la estación de Renfe del paseo Fabra y Puig. La propuesta de Interior se ha trasladado esta semana tanto a la Assemblea Nacional Catalana (ANC), que prefiere mantener la ubicación actual, como al colectivo Meridiana Resisteix.
Pese a que, en 2020, el Ayuntamiento de Barcelona ya planteó desplazar la protesta y la Guardia Urbana envió un informe a la Dirección General de Administración de Seguridad solicitando el mismo, el departamento que pilota Elena no ha tomado ninguna decisión al respecto hasta ahora. La policía municipal advirtió que las protestas causaban afectaciones importantes en la avenida Meridiana, puesto que se trata de una vía muy transitada, pero no ha sido hasta que se han producido los últimos momentos de tensión que Interior se ha pronunciado.
