Los grupos parlamentarios de la oposición han cargado este lunes contra los cambios en la cúpula del cuerpo de los Mossos d’Esquadra. Lo han hecho en la comisión de Interior del Parlament, donde el conseller Joan Ignasi Elena ha comparecido para rendir cuentas sobre los últimos movimientos en la cúpula policial, tal y como habían pedido PSC, PP, Cs, Vox y En Comú Podem entre críticas por la remodelación de los principales mandos.
Las formaciones señalaron que ven los cambios como un «aviso para navegantes». Elena niega que se haya hecho ninguna «purga» y defiende de nuevo que los movimientos «son una práctica habitual». También ha insistido en que los movimientos sólo los sabía él y el presidente Pere Aragonès, añadiendo que no los había compartido con los socios de Govern.
Sobre el nuevo comisario jefe del cuerpo, Josep Maria Estela, que toma el relevo de Josep Lluís Trapero, Elena ha dicho que «representa mejor que nadie esta idea de territorialización y la proximidad, y la capacidad de trabajar en equipo y cooperación de forma más horizontal». El conseller destacó la necesidad de un cambio del modelo de liderazgo y dirección, enfocado a la «coralidad», «más plural y cooperativo».
Respecto a la presunta corrupción en la cúpula de los Bomberos de la Generalitat, donde los Mossos hallaron facturas duplicadas e indicios de comisiones de un 2% en los contratos de mantenimiento de los camiones, Elena asegura que han actuado «desde el minuto cero» para cambiar esa dinámica «que se alarga desde hace mucho tiempo». El conseller recuerda que el 26 de mayo se incorporaron a la conselleria y el 3 de junio se iniciaba el proceso de resolución del contrato. Elena ha añadido que se han puesto «a disposición de la justicia» en un proceso que empezó «a lo largo del mandato anterior».
