A raíz del escándalo en el Parlament por los privilegios en las jubilaciones de algunos trabajadores que cobran el 100% del sueldo sin trabajar, ahora se ha abierto otro frente de polémica. La CUP denuncia que los diputados del Parlament siguen cobrando dietas por asistir a la cámara, aunque muchas sesiones son telemáticas por la pandemia.
Este hecho se denunció durante el confinamiento. De hecho, a instancias del presidente en ese momento, Roger Torrent, se acordó que voluntariamente parte del sueldo de los diputados fuese destinado a la lucha contra la covid. La mesa del Parlamento de la anterior legislatura se comprometió a revisarlo, pero a día de hoy todavía no ha cambiado nada.
Por todo ello, los cuperos reclaman que en la mesa del martes se lleve una propuesta y que se vote, y tildan de hipócrita que sólo se ponga el foco en las condiciones laborales de los funcionarios del Parlament, como ha asegurado en Twitter Pau Juvillà, secretario de la mesa.
Actualmente, cada diputado recibe una cantidad fija en función del lugar donde vive por desplazamiento y pernoctación, tanto si se desplaza como si no, sin justificante alguno. Este complemento varía en función de la distancia existente entre su domicilio y el Parlamento.
Así, varía desde los 16.975,56 euros al año que perciben quienes viven dentro del área metropolitana, hasta los 23.895,12 euros anuales si el domicilio está a más de 191 kilómetros de la cámara. En medio, todavía hay otras dos franjas: si el diputado vive a una distancia de hasta 80 kilómetros, cobra 22.070,76 euros anuales más; y si vive a una distancia de entre 81 y 190 kilómetros, percibe 23.694,48 euros.
