El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha respondido duramente a la que querella que le presentó ayer Junts con un ataque al secretario general de los posconvergentes, Jordi Sànchez. Casado ha asegurado que no les “van a callar” y que “un señor que ha sido condenado a nueve años de cárcel por cometer delitos tan graves como el de sedición, que ha destrozado un coche de la Guardia Civil y que se ha subido a él con un megáfono a instigar a la violencia contra las Administraciones del Estado a mí no me va a dar lecciones de legalidad y de democracia”.
El líder conservador ha justificado sus críticas a la escuela catalana -dijo que a los niños castellanohablantes les ponen piedras en la mochila o no se les deja ir al baño- diciendo que se hizo eco de una noticia aparecida en la prensa diez años atrás. “Dicen que es un artículo antiguo, y ellos hablan de hace 80 años en España”, ha señalado. Y ha añadido: “¿Si yo denuncio el acoso a un niño con una noticia que publicaba un medio de comunicación es incitación al odio?”.
Pablo Casado ha pronunciado estas palabras en el congreso del PP de Aragón un día después de que Junts se querellara contra él ante el Tribunal Supremo por calumnias, injurias e incitación al odio.
De hecho, Casado se ha reafirmado en sus declaraciones y ha afirmado que le “encantaría que el caso de Canet de Mar fuera una excepción, pero cada día aparecen 50 cartas de padres” con casos similares. Y sobre la concentración celebrada ayer en Barcelona por Som Escola, ha dicho con tono irónico que los defensores de la inmersión “se manifiestan para seguir excluyendo a los niños cuyos padres quieren que se les eduque en castellano y eso es pura concordia y pura fiesta”.
