Una gran mayoría del Parlament ha decidido mantener el acta de diputado de Pau Juvillà mientras no exista una sentencia firme del Supremo. La Comisión del Estatuto del Diputado, que debate y vota sobre incompatibilidades de los cargos, ha decidido mantenerle el acta.
La decisión deberá ratificarla el pleno la próxima semana. Este es el primer paso de la estrategia jurídica de Juvillà, a la espera de que la JEC mueva ficha. Juvillà ha recibido el apoyo del independentismo pero también y de momento de los comunes y el PSC.
«No concurre ninguna causa de incompatibilidad sobre el diputado Pau Juvillà i Ballester ni ninguna otra circunstancia que afecte a su condición de diputado del Parlament de Catalunya», recoge el dictamen que se elevará al pleno de la cámara. Los dirigentes han recordado que el afectado todavía puede recurrir a instancias judiciales superiores, es decir, el Tribunal Supremo.
El motivo de la inhabilitación de Juvillà son unos lazos amarillos que el diputado se negó a descolgar cuando era concejal en la Paeria de Lleida. Cuando se supo el contenido de la sentencia, la formación anticapitalista reivindicó que los lazos amarillos «no son un símbolo partidista» y que la sentencia era «un ataque a la libertad de expresión».
La condena propuesta por el TSJC es de seis meses de inhabilitación y 1.000 euros de multa, a razón de 12 euros diarios durante tres meses.
