El sindicato Metges de Catalunya considera que el presupuesto presentado por el Govern se queda «muy corto» para lo que necesita el país en sanidad pública y aseguran que las cuentas mantienen «la infrafinanciación crónica» del sistema. La Generalitat prevé destinar el próximo año al Departamento de Salud 11.171 millones de euros -un aumento de 1.382 millones respecto a los anteriores-, según el borrador de presupuestos que este martes se ha empezado a discutir en el Parlament.
Según el sindicato, la cifra sigue siendo «insuficiente» para hacer frente al gasto que genera la atención a la pandemia y la pospandemia, así como para revertir «por completo» los «recortes sanitarios aplicados desde 2010».
Calcula que habría que llegar a 15.000 millones, ya que la cantidad prevista por el ejecutivo catalán no permitirá realizar las inversiones que requiere el sistema «de forma prioritaria». Éstas son mejorar las condiciones laborales y retributivas de los profesionales, abordar el relevo generacional e incrementar la plantilla de facultativos o renovar y realizar el mantenimiento de las infraestructuras y los equipamientos.
El sindicato médico opina que el presupuesto es «meramente continuista» y «deficiente» para cubrir el gasto sanitario básico previsto para 2022, ya que «ni siquiera se aproxima» a los 12.000 millones que había pedido el conseller Josep Maria Argimon de acuerdo con el presupuesto ejecutado en los dos últimos años.
Ante este escenario, la organización recuerda que el sistema público de salud «no ha salido de la UCI» y alerta de que no lo hará «si no recibe la inyección de recursos que reclaman todos los expertos y actores del sector», que se sitúa en torno a los 15.000 millones de euros anuales, unos 5.000 más que los invertidos en 2020 y cerca de 4.000 más que los previstos en el borrador de las cuentas públicas de 2022.
