Toni Salleras, el jefe del área central de crimen organizado de los Mossos d’Esquadra, ha admitido que el auge de la producción y el tráfico de marihuana en Catalunya es de una gravedad «alta» y que no tiene «freno visible» al menos a corto plazo.
En declaraciones al programa Cafè d’idees (La 2 y Ràdio 4), Salleras ha cifrado en casi el doble las plantas de marihuana decomisadas este año que durante todo 2020: “En 2015, en Catalunya, los Mossos d’Esquadra decomisaron 65.000 plantas de marihuana; el año pasado decomisamos 265.000; y en lo que llevamos de este año, vamos por las 500.000”.
«Esto da una idea de que es un hecho que está en progresión ascendente y, de momento, sin freno visible al menos a corto plazo», ha añadido.
El jefe del área central de crimen organizado de los Mossos ha pedido, en nombre del cuerpo policial catalán, que la normativa se endurezca porque “hoy en día hemos avanzado tanto, y de forma tan negativa, que la normativa se debería adecuar”.
Salleras ha abogado por el endurecimiento de la normativa aduciendo que, si no es «especialmente dura», las «empresas ilegales» -como ha descrito los negocios de tráfico y producción- «irán al lugar donde sea más rentable» producir la marihuana. Además, ha indicado que “la droga se paga no tanto por lo que cuesta producirla, que no es mucho, sino por el riesgo que está asociado al tráfico de drogas», y que “por eso, una cantidad de droga aquí en España, o Cataluña en concreto, vale X, y en Alemania vale 3X o 5X”.
