El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha afirmado que «la opción de futuro es el traspaso del aeropuerto del Prat a las instituciones catalanas, y que sean las instituciones catalanas con el consenso de este país, con el consenso interno absolutamente necesario, con la preservación medioambiental evidentemente irrenunciable, quien decida el futuro del aeropuerto del Prat». El presidente Aragonès ha remachado que: «Cuando el futuro lo decide unilateralmente el gobierno español ni hay prosperidad ni hay preservación medioambiental».
Pere Aragonès ha comparecido este jueves para responder a la decisión de AENA y el gobierno central de parar la ampliación del aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat. Aragonès ha afirmado que la propuesta de futuro del gobierno catalán es: «Los aeropuertos catalanes gestionados desde Cataluña, bien gestionados y evidentemente con el compromiso medioambiental».
El presidente catalán ha reconocido, pero, que el del Prat es «un aeropuerto que necesita mejorar, sí, evidentemente, que necesitamos que mejore las conexiones intercontinentales, evidentemente, siempre se he reclamado». Pero Aragonès ha añadido que el posicionamiento de AENA y en especial del gobierno central sobre la ampliación de la infraestructura es una operación en la cual «estamos ante una maniobra de presión que lo que pretende es que, o aceptamos como ellos quieren hacer la ampliación o no la hay. O deciden ellos y aceptamos nosotros o no hay nada, y esto no lo podemos aceptar».
Aragonès ha afirmado que la no ampliación del Prat «es por lo tanto una operación de chantaje del gobierno del Estado y de AENA, y nunca han tenido la voluntad de invertir en Cataluña, y mucho menos invertir en la mejora del aeropuerto», añadiendo que «ponen como excusa la falta de consenso con la Generalitat, cuando la realidad es que quieren un modelo de desarrollismo propio de otra época, que no compartimos y que no queremos en Cataluña, y de hecho, que también tienen cuestionado dentro del propio gobierno español donde hay una profunda división sobre esta cuestión».
