El histórico partido ecologista Los Verdes-Alternativa Verde (EV-AV), liderado por Santiago Vilanova, hace un llamamiento a las bases del movimiento ecologista y ambientalista catalán para presentar listas en las próximas elecciones municipales. El objetivo es aglutinar al electorado, a las entidades cívicas y a las nuevas generaciones movilizadas por el cambio climático.
En un comunicado, afirma que “hay una gran decepción con los partidos políticos tradicionales que cuando gobiernan no reaccionan ante la emergencia ecológica”. Y menciona los casos de la ampliación del aeropuerto del Prat, la propuesta de los Juegos Olímpicos de Invierno en el Pirineo, el aumento del turismo de masas, la extensión del 5G, la ampliación de puertos deportivos, nuevas urbanizaciones en el litoral…
Según EV-AV, todos los indicadores hacen pensar que el Gobierno Aragonés no podrá cumplir los objetivos de la Ley de cambio climático (2017): el 50% de la electricidad que tiene que ser suministrada por fuentes renovables el 2030 y el 100% el 2050. Ahora bien, crear 600 Mw de energía solar fotovoltaica y 400 Mw de energía eólica durante una década será un hito imposible sin concertación social.
“Si no empujamos ahora y decididamente las renovables después del cierre de las nucleares de Ascó y Vandellòs a partir de 2035, tendremos que recibir la electricidad verde generada en los parques solares y eólicos de Aragón, un hecho que comportará nuevas líneas de alta tensión hasta el Baix Llobregat”, afirman los ecologistas.
“La acción local es decisiva para impulsar este cambio de paradigma y para repensar con urgencia el transporte, el consumo, la energía, el urbanismo, la vivienda, la agricultura, el reciclaje… Por eso hacemos este llamamiento apelando a la responsabilidad política del movimiento en defensa del territorio y de las docenas de entidades locales y comarcales que lo configuran”, señala EV-AV.
En su comunicado, concluye: “Ha llegado el momento de reaccionar y de evitar más dispersión de nuestras fuerzas. Rehuimos toda pretensión hegemónica y ponemos la legitimidad de nuestro partido al servicio de las luchas ecologistas y ambientalistas que no tienen una expresión política. Tenemos que conseguir que, finalmente, tengamos voz y voto en nuestros ayuntamientos y a la vez en los medios de comunicación. No podemos admitir que las fuerzas ajenas al ecologismo nos representen y secuestren nuestro ideario sedimentado durante muchas décadas”.
