El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha advertido al Gobierno de Pedro Sánchez que habrá «momentos de choque» si no «se encauza el conflicto político» con Cataluña. Lo ha hecho en una entrevista con la Agencia Catalana de Noticias (ACN), en la que ha asegurado que la voluntad del independentismo «no desaparecerá».
«Si no se encarrila el conflicto político, la voluntad de los catalanes de ser un Estado independiente no va a desaparecer«, ha advertido Aragonès al Gobierno central. El presidente catalán ha argumentado que el independentismo aún tiene recorrido y que tanto la generación actual como la futura volverán a plantear escenarios de «dificultad».
En referencia a la mesa de diálogo, que tendrá lugar en menos de un mes en Barcelona, Aragonès ha insistido en «la obligación de explorar una solución negociada» que sea avalada por los catalanes, y ha apostado por reunirse cada dos o tres meses. El presidente catalán ha afirmado estar «convencido» de que tanto JxCat como la CUP «contemplarán claramente la vía de la negociación con el Estado», y ha asegurado que la mesa de diálogo «no excluye ninguna otra propuesta estratégica» del independentismo: «Si alguien tiene una alternativa aplicable a corto plazo, que la ponga sobre la mesa», ha comentado.
El jefe del Ejecutivo catalán considera que, como presidente, debe estar «por encima de legítimos posicionamientos partidistas», y ha argumentado que «debemos tener una mirada larga y no debemos desaprovechar ninguna oportunidad para defender el referéndum y la amnistía donde sea». Aragonès considera «imprescindible» que entre un encuentro y otro se haga trabajo interina, reiteró que «es un proceso que tendrá su ciclo, y debe continuar en el tiempo precisamente para que tenga resultados».