El fuego que ha comenzado este sábado en Santa Coloma de Queralt, en la Conca de Barberà, y avanzó hacia Bellprat y Sant Martí de Tous, en la comarca de Anoia, sigue descontrolado y puede llegar a afectar 5.000 hectáreas. Desde el mediodía no ha crecido mucho la superficie quemada, que se mantiene en torno a las 1.300 hectáreas.
En una comparecencia a las seis de la tarde, Joan Delort, director general de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos ha dicho que el fuego «no lo podemos dar por estabilizado, ni mucho menos» y ha insistido en que «todavía nos quedan unas horas muy críticas».
David Borrell, el inspector jefe de los Bomberos, dijo que lo que más les preocupa de este incendio es que tiene «un perímetro muy alargado» y que, la entrada de marinada fuerte por la tarde les ha complicado el trabajo. Esto ha provocado muchas retomadas del fuego durante la tarde en dirección a Tous. Borrell dijo que las próximas horas, mientras sople la marinada, seguirán siendo críticas. Pero esperan que la situación mejore de cara a la noche.
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, compareció al mediodía desde el centro de mando de los Bomberos, en Santa Coloma de Queralt, para agradecer el trabajo de todos los efectivos y voluntarios que están trabajando en las tareas de extinción. Aragonés ha insistido en que la situación es crítica ante «uno de los incendios más preocupantes de lo que llevamos de verano, con un impacto mayor y con una cabeza del incendio muy activo». El presidente ha pedido «al conjunto del país que se ponga al lado de la Conca de Barberà y Anoia» y la manera de hacerlo, dijo, es evitar cualquier conducta de riesgo que limite los efectivos disponibles para luchar contra el fuego.
A las 14 h de este domingo, el incendio ya había afectado a cerca de 1.300 hectáreas, la mayoría, en el municipio de Bellprat, según los datos facilitados por los Bomberos y los agentes rurales. Más de 940 hectáreas quemadas son superficie forestal, 350 son superficie agrícola, 5 hectáreas son de suelo urbano y 856 están dentro del Espacio de Interés Natural del Sistema Prelitoral Central. Por municipios, los más afectados son Bellprat (con 1.068 hectáreas quemadas), Santa Maria de Miralles (106,5 hectáreas), Las Pilas (70 ha), Santa Coloma de Queralt (48,5 ha) y Pontils (2 hectáreas).
