El gobierno español ha salido al paso de la denuncia hecha pública este domingo por el director general de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos de la Generalitat, Joan Delort, que ha asegurado que la Moncloa había impedido la participación de hidroaviones de la Cataluña Norte en las tareas de extinción del incendio en Llançà.
El Ministerio de Transición Ecológica asegura que envió once medios aéreos en la zona que, sumados a los medios de la Generalitat, ocuparon el espacio aéreo «al máximo». «Por eso no se consideró oportuno ni necesario solicitar ayuda a la vecina Francia», defienden.
Concretamente, enviaron dos aviones anfibios de gran capacidad trasladados desde Torrejón de Ardoz y Pollensa, dos más de capacidad media que salieron de Reus y dos aviones de carga en tierra procedentes de Empuriabrava, además de un helicóptero Kamov que llegar desde Huesca. Ayer, mientras continuaban las tareas de control del incendio, también llegaron un nuevo avión anfibio de gran capacidad de Salamanca, un nuevo helicóptero Kamov de Guadalajara y dos aviones anfibios de capacidad media más desde Valencia.
El ministerio también asegura que planteó «reiteradamente» la posibilidad de que la Generalitat contara con el apoyo de la Unidad Militar de Emergencias, para evitar afectaciones sobre la población.
