El grupo parlamentario Socialistes i Units per Avançar ha planteado este 8 de julio, a través de la Mesa del Parlament, seis preguntas al gobierno de la Generalitat y a los departamentos de Interior, Educación y Derechos Sociales en relación a la escuela verano paramilitar organizada entre los días 18 y 20 de junio por la Societat d’Estudis Militares (SEM) y publicitadas por el programa FAQs, de TV3, el pasado viernes 2 de julio. La diputada socialista Beatriz Silva ya planteó el 7 de julio a la presidenta de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), Núria Llorach «como se justifica la promoción de unas colonias que realizan ejercicios paramilitares en un programa de la televisión pública de Cataluña».
Ahora son los diputados Ramon Espadaler, Esther Niubó y Raúl Moreno quienes preguntan directamente al gobierno de la Generalitat si conocía la realización de estas prácticas paramilitares en una escuela de verano y qué valoración hacen de ellas. Dos de las preguntas van dirigidas al conjunto del ejecutivo: «¿Considera el Govern de la Generalitat que el entrenamiento de tipo militar es una materia propia de una Escuela de Verano?» y «¿Le consta al Govern que la Sociedad de Estudios Militares reciba algún tipo de financiación pública?».
Al consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, le preguntan si «tiene conocimiento el Departamento de Interior de esta práctica. En caso afirmativo, ¿Cuál es el comportamiento al respecto? En caso negativo, ¿piensa el departamento impulsar alguna investigación al respecto?». A Violant Cervera, consejera de Derecho Sociales le dirigen dos preguntas: «¿Tiene conocimiento el Departamento de Derechos Sociales de la posible participación de menores en esta Escuela de Verano?» y «en caso de que hayan participado personas menores de edad, ¿Qué actuación o actuaciones prevé impulsar la Dirección General de Infancia y Adolescencia?». Y al consejero de Educación, Josep González-Cambray, le preguntan «¿Qué valoración hace el Departamento de Educación respecto la mencionada Escuela de Verano».
En el portal del SEM se explica que el objetivo de esta escuela de verano es «buscar vivir una experiencia lo más parecida a la de los profesionales de la milicia». Entre sus actividades se incluyeron pruebas físicas que, según explicó el periodista Quico Sallés en el programa FAQs, permitieron «que te pudieras entrenar como un miembro de un comando especial de los Navy Seals«. Se refirió a estas pruebas como «las semanas de infierno», que realizan algunos ejércitos, mientras en una gran pantalla de FAQs se proyectaban imágenes de personas arrastrándose por el bosque o sentadas en el suelo en fila india y abrazadas mientras unos monitores de la actividad les arrojaban cubos de agua. El periodista afirmó que era la segunda edición de esta escuela de verano militar y que «si la primera fue un éxito, ésta ha sido un exitazo». Destacó que se habían agotado las 60 plazas de que constaba y que se trata de una «cita obligada».
Una Cataluña independiente necesitaría 24.000 soldados (16.000 de regulares y 8.000 reservistas), catorce o dieciséis barcos de guerra y unos 70 aviones de combate, entre F-16 y helicópteros, según el informe del coronel irlandés retirado Dorcha Lee que encabeza las publicaciones del portal de la Societat d’Estudis Militars: Defender una Cataluña independiente. Lee considera que lo que llama Fuerzas de Defensa Catalanas (FDC) deberían contar con un Estado Mayor y un Cuartel General Conjunto, formados por unos 600 efectivos. Además, indica que el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa debería informar directamente al ministerio catalán de Defensa. También propone que el ejército de Tierra lo formen dos brigadas y que cada una cuente con tres batallones de infantería mecanizados, uno de tanques y uno de artillería ligera de campaña, con morteros pesados y misiles tierra-aire.
