El espacio político de los comunes, Podemos y la izquierda alternativa hace meses –casi se podría decir años– que reclamaba los indultos para los presos del 1-O. Durante mucho tiempo fueron ignorados, tildados de equidistantes, de soñadores, de querer convencer el PSOE de una cosa que no pasaría nunca.
Pasados los meses y los años, los presos independentistas han salido finalmente a la calle fruto de un indulto que ha sido anunciado a bombo y platillo por el presidente español, el socialista Pedro Sánchez. Después de anunciarse, de hecho, los comunes pasearon el presidente del grupo de Unidas Podemos, Jaume Asens, por todos los medios de comunicación posibles para reivindicar la paternidad de la propuesta. Pero ha servido de muy poco. En España nadie piensa que ellos son los impulsores de la propuesta, y en Cataluña todavía menos.
Por otro lado, Jaume Asens, empieza a estar “amortizado”, según parece que considera la dirección de Podem. Con el relevo de Pablo Iglesias al frente del partido y con la “nueva etapa” que aseguran que se abre respecto a Cataluña después de los indultos a los presos independentistas, hay una parte del partido que quiere relevarlo y buscar una nueva cara para el grupo.
