Los últimos altos cargos procesados por el 1-O se niegan a declarar

Se les acusa de los delitos de desobediencia, prevaricación, malversación de fondos públicos y falsedad documental

Los últimos ocho citados a declarar en la causa que investiga una treintena de ex cargos del Govern por los preparativos del 1-O se han acogido al derecho a no declarar ante la jueza instructora.

El juzgado de instrucción 13 de Barcelona ha citado las últimas semanas a todos los investigados por segunda vez para interrogarlos por las resoluciones del Tribunal Constitucional (TC) sobre el proceso soberanista, y este lunes estaban citados ocho responsables, como el director de Catalunya Ràdio, Saül Gordillo, el ex delegado del Govern en Bruselas Amadeu Altafaj, el ex secretario de Comunicación Jaume Clotet, o el ex secretario general de Trabajo, Josep Ginesta, entre otros.

Como el resto de encausados ​​en esta causa, estaban citados para aclarar aspectos de unas resoluciones del Tribunal Constitucional que deberían desobedecido y sobre las que no se les había preguntado. Los otros procesados ​​tampoco declararon.

Son los últimos de los 30 altos cargos del Govern acusados ​​de los delitos de desobediencia, prevaricación, malversación de fondos públicos y falsedad documental.

A las puertas de la Ciudad de la Justicia se han concentrado para apoyarlos varios diputados en el Parlamento de ERC y JxCat, como la misma presidenta, Laura Borràs, Albert Batet, Joan Canadell, Elsa Artadi, Damià Calvet, Alba Vergés y Chakir el Homrani.

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