El consejero de Salud, Josep Maria Argimon, se ha mostrado partidario de que la mascarilla deje de ser obligatoria en espacios exteriores. «En determinadas condiciones», ha matizado el conseller, tras recordar que Cataluña fue el primer territorio que introdujo la obligatoriedad de la mascarilla en la vía pública, hace prácticamente un año, y que luego se fueron añadiendo otros comunidades autónomas. Por ello, indicó, ahora hay que modificar el decreto que regula la obligatoriedad.
«Ir por la calle solo, con la burbuja o en grupos pequeños sin mascarilla, sería perfecto, normal», afirmó Argimon, que también ha dicho que «debemos normalizar poco a poco, sin olvidar que la pandemia no ha terminado». Las nuevas variantes, especialmente la Delta, es la amenaza que más preocupa en estos momentos en Salud: «Es lo que nos puede torcer el camino».