Los taxistas de Barcelona han vuelto a manifestarse por las calles de la ciudad, con una marcha lenta que ha salido de la plaza de la Reina María Cristina, junto a la plaza de España, después han dejado los coches en la Vía Laietana para acabar yendo a pie hasta la plaza de Sant Jaume dónde han ido a reunirse con responsables del ayuntamiento.
El sector del taxi reclama, de nuevo, que las autoridades municipales hagan un control más exhaustivo, con más inspecciones y más sanciones, de los vehículos de alquiler con conductor (VTC). Los taxistas denuncian que los profesionales de VTC «desafían a las diferentes policías y administraciones» incumpliendo con la precontratación del servicio, los descansos obligatorios, la circulación sin servicio contratado, el estacionamiento en la vía pública, la hoja de ruta obligatoria o la normativa de la ITV.
La protesta de los taxistas, que ha provocado problema de tráfico en el centro de la capital catalana, también reclamado la creación de una app pública «de mano alzada», la cual califican de «extremadamente urgente» al considerar que a los ciudadanos les hace falta «una herramienta pública de petición de taxi digital competitiva».