Estudiantes universitarios catalanes han iniciado este miércoles una serie de movilizaciones para reclamar medidas que reviertan el impacto de la pandemia en el ámbito educativo, que denuncian que ha provocado una «situación de emergencia» en las universidades.
En particular, se dirigen a los rectores para que se comprometan a firmar el manifiesto Compromiso contra la crisis educativa, que consta de cinco puntos con los que pretenden garantizar un modelo universitario público y equitativo.
El manifiesto reclama la equiparación de los precios de másteres y grados, y grados entre sí, la remuneración obligatoria de las prácticas universitarias, el apoyo para la absolución de todos los «encausados por defender la universidad pública», un «plan de choque por el catalán contra la emergencia lingüística» y «protocolos feministas efectivos de revisión de los planes docentes».
Unos 80 estudiantes, según la Guardia Urbana de Barcelona, han comenzado las movilizaciones cortando durante la mañana la avenida Diagonal en los dos sentidos de la marcha, a la altura del Palacio de Pedralbes.
Este corte ha provocado colas y retenciones en la B-23, desde Sant Joan Despí, ha dejado sin servicio las paradas del Tram de María Cristina y Palau Reial, y ha obligado a desviar seis líneas de autobús.