Porque sabe que Vox llevará a los juzgados a un montón de directivos y presentadores de TV3. Una de las primeras acciones del grupo de Vox en el Parlament ha sido presentar en la Mesa una serie de preguntas sobre TV3. Su director, Vicent Sanchis, sabe cómo se las gastan los dirigentes de Vox y que son muy aficionados a llevar todas sus batallas políticas a los juzgados. El partido ultraderechista es impulsor de numerosas querellas contra las personas implicadas en el proceso independista, incluidas las que han acabado en prisión por organizar el referéndum del 1 de octubre de 2017. Ahora trasladará a los juzgados todas las denuncias de sectarismo y asuntos de corrupción y nepotismo que se han debatido estos últimos años en la comisión de control de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) y que hasta ahora eran ignoradas por Sanchis.
Vicent Sanchis tiene pendiente el juicio por desobedecer la instrucción del Tribunal Constitucional de no emitir los anuncios de promoción del referéndum de 2017. En este proceso tuvo que comparecer, junto con el director de Catalunya Ràdio, Saül Gordillo, la presidenta en funciones de la CCMA, Núria Llorach, y el entonces director de marketing de la CCMA, Martí Patxot. En este proceso, Gordillo ha afirmado ante el juez que no era el responsable de la emisión de los anuncios y que los impusieron Patxot y Llorach. Sanchis no quiso declarar y pasó un muy mal rato en el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona. Una mal rato que no quiere volver a repetir y por el que pasará por supuesto quien le suceda en el cargo si continúa con su política de favorecer a determinadas productoras o convertir TV3 en un aparato propagandístico del independentismo.
Sabe que le queden pocos días al frente de TV3 y confía en dejar el cargo antes de que empiecen a llover las querellas de Vox, que están al caer.
