La redacción de TV3 se opone abiertamente al nombramiento del editor i director de El Nacional, José (Pepe) Antich como director de TV3, tal y como pretende el presidente de JxCat, Carles Puigdemont. Este nombramiento se consideraría una auténtica provocación ya que Antich se ha mostrado en los últimos años como un periodista sectario, descaradamente favorable a la independencia y está implicado en turbios asuntos de financiación irregular de El Nacional. El nombre de Antich está sobre la mesa de las conversaciones entre ERC y la CUP por un lado y JxCat por el otro para sumar los votos de los diputados y diputadas del partido de Puigdemont a los favorables a la investidura del republicano Pere Aragonès como presidente de la Generalitat en una nueva sesión del Parlament.
La filtración de la noticia de que el nombre de Pepe Antich está presente en esas conversaciones para que JxCat vote a favor de Aragonès ha caído como una bomba entre los periodistas de TV3, incluso los que, como Helena García Melero, Jordi Eroles o Xavier Graset, se han mostrado cercanos a JxCat y Puigdemont o abiertamente partidarios de la independencia de Catalunya. Las organizaciones sindicales de TV3 también se opondrían frontalmente a este nombramiento que incumpliría sus exigencias, asumidas por la nueva ley de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), de que los nombramientos de los directivos de este organismo, de TV3 y Catalunya Ràdio se hagan por concurso público.
Visto este rechazo, JxCat parece que ha cambiado su estrategia y ahora propone a Antich como director de la CCMA, un organismo que está por encima de TV3 y que no conlleva la gestión diaria de la información o la selección de los programas que se incluyen en la parrilla. El actual director de Catalunya Ràdio, Saül Gordillo, había sonado como candidato a presidir la CCMA y su nombre aún no se ha descartado, aunque desde JxCat se le ve demasiado vinculado a ERC y no le perdonan las sus desavenencias con la actual presidenta en funciones de la corporación, Núria Llorach, que intentó cesarlo raíz de la marcha de Mònica Terribas de la emisora.
Otra oposición que encontraría Pepe Antich si se propusiera su nombre como director de TV3 sería la del Parlament. Su candidatura sería reprobada ya que la mayoría de la cámara votaría en contra de su nombramiento. Eso sí, Antich podría ignorar esa reprobación, tal y como hizo en dos ocasiones el actual director de TV3, Vicente Sanchis. De hecho, ERC y, sobre todo, la CUP entienden que la decisión de Puigdemont de poner el nombre de Antich sobre la mesa de negociaciones está hecha con la convicción de que es un fracaso pero que permitirá que se acepten otros nombres menos polémicos pero también fieles a la persona y el comportamiento político del presidente de JxCat.
