El líder de Vox en Cataluña, Ignacio Garriga, advirtió al independentismo que se prepare porque «ustedes quizás trabajarán poco, pero el Tribunal Constitucional trabajará mucho», en una intervención durante el debate de investidura que se ha producido en una sala semivacía después de que la abandonaran una gran partes de los diputados como muestra de rechazo a la formación ultraderechista.
Cuando ha terminado la primera intervención de Garriga, la presidenta del Parlamento de Cataluña, Laura Borras, manifestó que el dirigente de Vox había incurrido en «manifestaciones discriminatorias por razón de raza», injurias, «infudios lesivos», «vulneraciones de derechos fundamentales como el derecho a la presunción de inocencia «y» generalizaciones inaceptables «sobre el pueblo de Cataluña.
Garriga, entre otras manifestaciones, había hecho una exposición criminalizadora de los menores no acompañados (los mena) y dijo que Borràs está imputada por corrupción. Otro diputado de Vox ha pedido a Borràs que mantuviera «la neutralidad» como presidenta de la cámara.