El gobierno de la Generalitat cerrará la prisión de Wad-Ras en un plazo de cuatro años y la prisión de Trinitat Vella en seis, según ha anunciado este miércoles el vicepresidente y presidente en funciones del ejecutivo catalán, Pere Aragonès, acompañado de la consejera de Justicia, Ester Capella, y de la teniente de alcalde y regidora de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad de Barcelona, Janet Sanz.
Pere Aragonès ha explicado que estos cierres forman parte de los acuerdos a los cuales llegaron el gobierno catalán y el ayuntamiento de Barcelona que llevaron al cierre de la prisión Modelo. Aragonès también ha anunciado que está prevista la construcción de dos nuevos centros penitenciarios en la Zona franca de Barcelona.
Generalitat y Ayuntamiento de Barcelona tienen que firmar pronto el acuerdo de financiación para descontaminar los terrenos donde irán las dos nuevas prisiones al haberse encontrado restos de plomo. En los terrenos donde estaban las prisiones de Trinitat Vella i Wad-Ras está prevista la construcción de equipamientos para los barrios y viviendas sociales.
En las nuevas instalaciones de Zona Franca irán presos en régimen abierto en uno de los dos centros, mientras que el otro estará destinado solo para mujeres. La consejera Capella ha declarado que «tendrá en cuenta los espacios de crianza, por empoderamiento femenino, para que estén preparadas para la libertad plena, también la vinculada a sus relaciones afectivas y sexuales, que tienen que ser saludables, sin sumisión o sin machismo».
