Segunda jornada de protestas en contra del encarcelamiento del rapero leridano Pablo Hasél. La concentración más multitudinaria se ha celebrado en Barcelona. La protesta ha comenzado en los Jardinets de Gràcia y, desde allí, ha ido bajando por Paseo de Gracia hasta el centro de la ciudad. Allí, algunos manifestantes han hecho barricadas y quemado contenedores. Los Mossos se han enfrentado con los manifestantes.
En Lleida, más de un millar de personas se han manifestado por el centro de la ciudad, en una marcha improvisada hasta la prisión de Lleida para reclamar la amnistía. La manifestación no ha sido tan numerosa como la de este martes, que terminó con disturbios, con 8 detenidos y 14 heridos entre agentes y manifestantes y tres motocicletas de la Guardia Urbana quemadas.
En Girona, unas 600 personas, según la policía municipal, se han concentrado en la plaza 1 de octubre y se han dirigido hacia los juzgados. La protesta se ha hecho en medio de un incremento de la presencia policial. Algunos manifestantes lanzaron piedras.
En Vic, donde este martes algunos manifestantes atacaron la comisaría de los Mossos, poco más de un centenar de personas se han concentrado en la Plaza Mayor.
Este miércoles se han convocado protestas en una treintena de ciudades de todo el estado. En Madrid, ha habido cargas policiales en la protesta para reclamar la libertad de Hasél. Medio millar de personas se han concentrado en la Puerta del Sol en contra del encarcelamiento del músico. Con pancartas contra la «ley mordaza» y pidiendo «libertad de expresión», los manifestantes han mantenido enfrentamientos verbales con la policía.
En la protesta de Barcelona de ayer, una manifestante perdió un ojo y será operada en las próximas horas. Según el centro Irídia por los derechos humanos, la joven recibió el impacto de una bala de foam.
