Los disturbios que se han producido durante las protestas convocadas en diversos puntos de Cataluña por el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél, la noche de este martes, han acabado con un balance de 15 detenidos y 33 heridos.
Tres de las detenciones se han producido en Barcelona, cuatro en Vic y ocho en Lleida. De los 33 heridos atendidos por el Servicio de Emergencias Médicas (SEM), 17 son agentes policiales, y ocho han sido trasladados a centros hospitalarios. Todos son heridos leves excepto una chica que, en Barcelona, recibió el impacto de un proyectil policial de foam en la ceja e ingresó en el hospital en estado menos leve.
15 personas fueron atendidas por el SEM en Vic, y cinco personas fueron atendidas y tres trasladadas al hospital en Lleida, mientras que Barcelona sumó once asistencias y cuatro traslados, Reus una asistencia y un traslado, y Girona, una asistencia.
Manifestantes violentos vandalizaron la comisaría de los Mossos de Vic, que recibió la visita del consejero de Interior, Miguel Samper, el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, y la alcaldesa de la localidad, Anna Erra. También han recibido ataques la comisaría de la Policía Nacional ubicada en la calle Bosch de Barcelona, junto a la Vía Augusta, y sucursales bancarias. En Lleida, las sedes del PSC y del PP han sido dianas de los actos vandálicos, al igual que la Subdelegación del Gobierno.
