El Departamento de Presidencia de la Generalitat concedió los días 6 y 26 de octubre dos ayudas a fondo perdido a Acció Cultural del País Valencià (ACPV) de 649.206,55 euros y 265.000 euros, respectivamente. La primera es una cuota más de la hipoteca por el local El Siglo, que adquirió ACPV y que viene financiando el gobierno catalán desde el año 2004. Este acuerdo es una de las herencias más pesadas y extrañas que dejó Jordi Pujol a los gobiernos de la Generalitat posteriores a su retirada y que ninguno de ellos ha osado romper. Los 265.000 euros de la segunda ayuda son para «financiación de las actividades de la asociación durante 2020». Además, otras entidades de la órbita de ACPV o directamente dirigidas por Eliseu Climent, uno de sus fundadores y de la que fue primer secretario general y luego presidente, han recibido también decenas de miles de euros en ayudas diversas. En total, este pool de entidades ha recaudado más de un millón de euros de la Generalitat y otras administraciones catalanas.
En la web de Transparencia de ACPV aún no figuran los datos correspondientes al año 2020. Los de 2019 recogen 265.000 euros de una subvención estructural de la Generalitat, además de la cuota correspondiente por el pago de la hipoteca de local de la entidad, 17.000 euros de la Diputación de Girona, para «contribuir a la proyección de la lengua y la cultura catalanas» y 30.000 euros del Ayuntamiento de Barcelona, para financiar el proyecto «Barcelona y Valencia, lazos culturales». También hay subvenciones de la Generalitat valenciana y de los ayuntamientos de Valencia, Ontinyent y Betxí. Las ayudas que recibe de administraciones valencianas no representan ni la decimoquinta parte del dinero que le llega desde Catalunya.
Los premios Octubre, que organiza la editorial Tres i Quatre, propiedad de Climent, también reciben ayudas directas del gobierno de la Generalitat de Catalunya. La Oficina de Suport a la Iniciativa Cultural ha financiado este 2020 con cerca de 13.000 euros la edición de 2019 y es de suponer que habrá dedicado una partida similar a la de 2020. La beneficiaria ha sido la Fundación Francesc Eximenis, que forma parte de este entramado de asociaciones. La última edición de estos premios se celebró el 31 de octubre en la sala de actos del local cuya hipoteca paga la Presidencia de la Generalitat catalana, que lleva el nombre de Centre Octubre de Cultura Contemporània. Al final del acto, Eliseu Climent leyó una carta que el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, había enviado y donde afirmaba que «los premios, como la editorial y la librería, son espejo de unos países que no renuncian a nada».
La Fundación Francesc Eximenis ha recibido 47.000 euros del Departamento de la Presidencia en la convocatoria de ayudas para el «desarrollo de iniciativas de periodismo y fortalecimiento del espacio catalán de comunicación» y 10.000 euros de la Agencia de Residuos de Catalunya por un «reportaje monográfico edición en catalán anuario The Economist«. Total, unos 70.000 euros procedentes del gobierno catalán.
El Departamento de Cultura también ha hecho una modesta aportación económica a la editorial Tres i Quatre comprándole libros de Josep Maria Sagarra por valor de 2.307 euros. Otra entidad valenciana que ha recibido financiación de administraciones catalanas es el Instituto de Economía y Empresa Ignasi Villalonga, del que Eliseu Climent es secretario. El 31 de julio, la Diputación de Girona le adjudicó la compra de 221 ejemplares del libro «La Gobernanza Local en la Eurorregión del arco mediterráneo» por cerca de 15.000 euros.
