Con la entrada en vigor este jueves de las nuevas restricciones, los Mossos d’Esquadra han anunciado la puesta en marcha de un dispositivo formado por 258 puntos de control en vías principales y secundarias de la red viaria, tanto de día como de noche.
La policía autonómica se coordinará con las policías locales para controlar los accesos de entrada y salida de los municipios con el objetivo de verificar que los desplazamientos se ajustan a las excepciones permitidas. También se harán controles en las entradas de las estaciones de Renfe y de Ferrocarrils de la Generalitat, así como en los bares y restaurantes.
Entre las nuevas medidas que entran hoy y que se alargarán diez días, destaca el confinamiento municipal durante toda la semana, el cierre de centros comerciales, la prohibición de las actividades extraescolares (salvo las de grupos burbuja) y las de ocio, aunque se permiten las actividades al aire libre. En este punto, se permiten las actividades deportivas al aire libre, pero se obliga al cierre de los gimnasios.
También se ha decretado que sólo podrán abrir, durante este periodo, los comercios de menos de 400 metros cuadrados, aunque durante los fines de semana sólo podrán abrir los comercios considerados esenciales, como son las tiendas de alimentación y las farmacias.
En cuanto a bares y restaurantes, continuarán como hasta ahora: pueden atender con un 30% del aforo de las 07.30h a las 09.30h y de las 13h a las 15.30h. Cines, museos, teatros, auditorios o salas de exposiciones pueden abrir con un aforo del 50%.
Por otro lado, los Mossos han alertado de que han tramitado denuncias de personas que han recibido una llamada en la que se les indica que se les irá a vacunar a su domicilio. En una entrevista en RAC1, el consjero catalán de Interior, Miquel Sàmper, ha pedido a la gente mayor que no haga caso de estas llamadas subrayando que la campaña de vacunación se llevará a cabo en los centros sanitarios y, excepcionalmente, en casa si la persona tiene «una dificultad imperiosa física de traslado».
