La portavoz del Gobierno, Meritxell Budó, ha declarado este sábado en Catalunya Ràdio: «Quizás lo cerraríamos todo si nos lo pudiéramos permitir». La consejera en funciones de la Presidencia ha valorado las nuevas restricciones que anunció ayer el Ejecutivo, y ha defendido que todas las medidas tienen el aval sanitario.
Unas declaraciones que hace al día siguiente que la consejera de Salud, Alba Vergés, afirmara que su departamento había aconsejado medidas «más restrictivas» que las que ha anunciado el Govern, ante el aumento de contagios del coronavirus y en las puertas de la Navidad. «El punto de vista sanitario es muy claro, pero los debates se llevan en el marco del Govern, que debe contemplar el equilibrio entre la emergencia sanitaria, la económica, la social y la emocional», justificaba.
Budó, por su parte, ha vuelto a reclamar «conciencia» a la ciudadanía y no salir de la comarca «si no es necesario». «Uno puede hacer todas las excepciones del mundo, pero también debe ser consciente de lo que está haciendo cuando se mueve», argumentó.
La consejera también ha defendido la ampliación perimetral al ámbito comarcal, ya que «poder ir a un destino fijo ya estaba permitido» y había un incremento de tráfico los jueves y los lunes.
La consellera ha aseverado que el Govern está movilizando «todos los recursos» que puede para acompañar los sectores afectados. Por otra parte, ha exigido al Estado que aplique ya un plan de choque suficiente, y recriminó que la Moncloa no esté aportando todo el gasto que debería para dar las ayudas suficientes para paliar la crisis.
