El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha avisado que los tests que se han empezado a comercializar en las farmacias este lunes «no son ningún pasaporte de seguridad», por lo que ha asegurado que «no nos eximen de las medidas de prevención: manos, distancia personal, mascarilla y ventilación».
En el marco de la presentación de la campaña de Navidad de Sanidad, que busca subrayar las medidas de prevención contra la covid-19, Illa ha recordado que estos tests se practican en casa y que el paciente debe tener una prescripción médica para adquirirlos en la farmacia.
El titular de Sanidad ha reclamado «prudencia» y ha explicado que si el resultado de la prueba es positivo, la persona en cuestión se deberá hacer una PCR para confirmarlo.
En una línea similar, el secretario general del Departamento de Salud, Marc Ramentol, ha desaconsejado el uso de las pruebas rápidas como «pasaporte familiar» de cara a las celebraciones de Navidad.