El comité de expertos nombrados por el Govern catalán, que tienen el encargo de dibujar los cambios que necesita el sistema de salud pública después de la pandemia, concluye que la sanidad catalana necesita incrementar en 5.000 millones su financiación en los próximos cinco años.
La cifra es superior a los 1.500 euros de recortes registrados del 2010 al 2014 y obedece a la voluntad de los expertos de equiparar el sistema de salud catalán al otros países europeos.
El comité pide priorizar las áreas del sistema sanitario público que se consideren estratégicas. También plantea que el esfuerzo económico vaya destinado al gasto en recursos humanos, así como en inversiones sanitarias en infraestructuras y equipamientos para corregir la obsolescencia tecnológica que sufre el sistema.
El informe también pide revisar y priorizar la cartera de servicios con criterios de efectividad y coste, evaluar los resultados de los centros sanitarios y promover la fijación transparente de un precio justo para los nuevos fármacos. También integrar los métodos y fuentes tradicionales de vigilancia epidemiológica con la inteligencia artificial y otras aproximaciones innovadoras de la ciencia de los datos.
